¡¡¡Sevilla tuvo que ser…!!! Podría decir muchas cosas para convenceros de que os vengáis de excursión con nosotros a Sevilla, pero voy a ir al grano: estoy enamorado de esa ciudad hasta los tuétanos de los huesos y me siento adoptado por ella. ¿Por qué? Pues las mejores cosas de la vida no tienen explicación, pero a lo mejor es porque es especial y única como ninguna, por alegre y por triste, que de todo tiene, por abierta y por cerrada, por ostentosa y por austera, porque es la madre de todos los contrastes y en ella los tópicos se hacen realidad. Porque, como dijo Antonio Gala, lo malo no es que los sevillanos crean que tienen la ciudad más bonita del mundo; lo malo es que puede que tengan hasta razón. Todos los años aprovechamos el puente de la Inmaculada para organizar un viaje a Sevilla, pero esta vez, y ya que los festivos caen en martes y jueves, hemos decidido que dure toda esa semana, dando un paso más y organizando algo para los que ya conocéis la ciudad (que nunca se acaba de conocer, eso también es verdad): nos vamos a recorrer la provincia. Eso sí, dormiremos en Sevilla y dedicaremos un par de días a algunos de sus rincones menos conocidos (no iremos a la catedral, p.ej., pero nos pasmaremos en San Luis de los Franceses o en el palacio de la condesa de Lebrija; iremos al Alcázar, pero de noche y en una visita súper especial, solo para nosotros...), pero sobre todo vamos a descubrir un territorio que está lleno de tesoros tan extraordinarios como Itálica, la ciudad en la que nacieron Trajano y Adriano; Carmona, tan bien conservada que uno puede ver allí cómo era Sevilla en el siglo XVI, su edad de oro; Osuna y el panteón de los duques, con los cuadros pintados en Nápoles por Ribera; las marismas del Guadalquivir, con los caballos de los Peralta; y los impresionantes dólmenes de Valencina, las canteras de Osuna, las torres de Écija, Estepa y los dulces de Navidad... y todo ello salpicado con una gastronomía estupenda que iremos descubriendo en cada lugar. Y por si faltara algo nos vamos en un momento perfecto, porque la Inmaculada en Sevilla es fiesta grande desde hace siglos, y la ciudad, que no en vano tiene el título de Mariana, se vuelca con esta celebración. Y porque el clima en Sevilla es otra cosa, y diciembre suele ser agradable para estar por la calle (y más para nosotros, que venimos de Zaragoza). Y porque sí, porque Sevilla tuvo que ser y no necesita motivos. Domingo 4 Cogeremos el AVE en Zaragoza a las 10'20, llegando a Sevilla hacia las 14'00. Nuestro autobús nos estará esperando para llevarnos al hotel Zenit**** , en Triana, donde nos instalaremos. Comida (incluida). Esta tarde tendremos una primera toma de contacto con la ciudad. Este viaje está diseñado pensando en los que ya la conocen y quieren descubrir otros rincones menos transitados por el turista que viene un par de días, así que comenzaremos por "nuestro" barrio: Triana. Conoceremos la historia de este barrio tan marinero, su vinculación con la alfarería (no en vano dos de las patronas de Sevilla, las santas Justa y Rufina, que sujetaron la Giralda para que no se cayera en uno de los terremotos que ha sufrido la ciudad, eran alfareras y trianeras), la relación con el río, la bellísima capillita del Carmen y el puente, que en el siglo XIX vino a sustituir al puente de barcas, el único que había en la ciudad. Precisamente en la calle que da al río, la calle Betis, se conocieron los padres de Antonio Machado un día muy especial: el día que los delfines subieron por el río y todo el mundo acudió a verlos. Ella trabajaba en una pastelería, él era uno de los primeros especialistas en folclore, o el primero, y de aquel encuentro nacería uno de los más grandes poetas de nuestra lengua (y su hermano Manuel también, por supuesto). Cruzaremos el puente y, por la hora, es posible que nos encontremos con María Belén Santa Juana, porque "va de Sevilla a Triana en cuanto dan la oración", como cantaba Lola Flores. En cualquier caso, y siguiendo con las coplas, nos dirigiremos a la orilla de enfrente, dominada por la majestuosa fachada de la Real Maestranza de Caballería, la "catedral del toreo" y, además, un bellísimo edificio construido en el siglo XVIII. Gusten o no los toros es un lugar que hay que conocer, lleno de Historia y de historias cantadas en versos y coplas. Continuaremos nuestro recorrido por el barrio del Arenal, desde el que salieron durante siglos los barcos que iban y venían a las Indias depositando aquí las riquezas del Nuevo Mundo. Aquella Sevilla, "puerto y puerto de Indias", cautivó a nuestros grandes escritores: Lope de Vega ambientó aquí varias de sus obras, Cervantes la conoció bien (incluida la cárcel real, de la que fue ilustre huésped) e hizo vivir aquí a los pícaros Rinconete y Cortadillo entre muchos otros... Hasta Santa Teresa, que vino a fundar, aunque la cosmopolita, alegre y bullanguera Sevilla no gustó demasiado a la austera monja castellana. Continuaremos por el exterior del Teatro de la Maestranza, la Torre del Oro y la Casa de la Moneda, un entorno que nos permitirá viajar con la imaginación a los siglos XVI y XVII. Aquí se guardaban el oro y la plata que llegaban de América y estaba la ceca de la ciudad, donde se acuñaba moneda ya desde siglos antes (más de 200 personas llegaron a trabajar en esta actividad en su mejor momento). Acabaremos el día aquí, de forma que los que lo prefiráis podáis quedaros a cenar en la zona de la catedral y el barrio de Santa Cruz, o bien volver a Triana y tomar unas tapas por la calle Betis o San Jacinto, al lado del hotel. Lunes 5 Hoy nos vamos a Carmona, una de las localidades más cargadas de historia y monumentos de toda Andalucía, con más de 5.000 años de ocupación. Desde los cartagineses y los romanos todos han dejado su huella en este lugar, como podremos descubrir. Comenzaremos por el alcázar, que forma parte de un conjunto de fortificaciones en el que hay restos de murallas nada menos que de época cartaginesa y romana. Pero hay mucho más: pasaremos por la iglesia de san Pedro y su Giraldilla (una de las muchas torres que siguieron el modelo de la Giralda de Sevilla después de ser recrecida con un último cuerpo en el Renacimiento), veremos en el Ayuntamiento (situado en una plaza que coincide con el antiguo foro romano) el magnífico mosaico de la Medusa... Veremos también la plaza del Mercado de abastos, construido en el siglo XIX en el lugar en el que estuvo el convento de Santa Catalina, parte de cuyo claustro aprovecha. Comeremos (incluido) y nos acercaremos a la necrópolis romana, uno de los conjuntos funerarios más amplios y mejor conservados de la Península, con conjuntos como la tumba del elefante (una escultura probablemente relacionada con algún culto oriental), que era también un santuario dedicado a Atis y Cibeles. Nos iremos después a Marchena donde solo haremos una breve parada, para visitar la sacristía de la iglesia de San Juan Bautista con sus... ¡¡¡nueve obras de Zurbarán!!! Un verdadero tesoro casi oculto en este lugar. Acabaremos el día en Morón de la Frontera, viendo la conocida como la catedral de la Sierra Sur, la magnífica iglesia de San Miguel. A principios del siglo XVI muchos pueblos querían emular la obra de la inmensa catedral de Sevilla, y uno de los templos más impresionantes fue este de Morón. En Morón, por cierto, tuvo lugar la historia del famoso gallo, que acabó "sin plumas y cacareando", como está en el monumento que se le dedicó. ¿Sabéis qué ocurrió? Pues os lo contaremos. Vuelta a Sevilla y tiempo libre. Martes 6 Hoy vamos a movernos por la zona conocida como la Sierra Sur, y para empezar visitaremos Osuna, una ciudad ducal presidida por la imponente colegiata y la antigua universidad. Los delirios de grandeza de los Girón, que querían engrandecer su señorío en todos los órdenes (el religioso, el artístico, el del conocimiento...) llevaron a la construcción de este edificio espectacular que incluye su soberbio panteón. Pero aún hay más, mucho más: uno de los duques de Osuna fue virrey de Nápoles y allí conoció a José de Ribera, el pintor más importante de la escuela napolitana del barroco. De aquella relación vinieron numerosos encargos, y aquí se conservan nada menos que cinco magníficas obras de "lo spagnoletto", llamado así en Italia por su escasa altura. Después de visitar la colegiata y el patio de la antigua universidad, daremos un paseo por la parte baja del pueblo, con calles que nos hacen viajar en el tiempo, un conjunto extraordinario de conventos, iglesias, palacios... Nos queda aún El coto de las canteras, cuya explotación comenzó ya en el siglo V a.C. por las tribus de turdetanos. En medio de la campiña se alza una mole de piedra esculpida durante millones de años por el sol, lluvia y el viento, y por los humanos desde hace 2.500. De aquí han salido los sillares que conforman hoy los palacios de Osuna, sus iglesias y muchas de las casas de su centro histórico, a la vez que el cerro se iba horadando poco a poco. Hoy se ve, además, todo un conjunto de obras esculpidas ya en el siglo XXI, reproduciendo las esculturas íberas que ahora se encuentran en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid. Comeremos (incluido) y nos iremos a Estepa, un lugar perfecto para visitar en vísperas de Navidad. ¿Por qué? Pues porque nada más entrar ya huele a canela, y nos vamos encontrando con fábricas, obradores y tiendas en las que encontrar el producto estrella, los mantecados y polvorones. Empezaremos por el convento de Santa Clara, donde parece que comenzó la elaboración de dulces. Hoy las monjas siguen haciendo maravillas, y se cuenta que sus tocinos de cielo son una verdadera obra de arte. Nos iremos después a la fábrica de La estepeña, donde no solo vamos a conocer cómo es la fabricación tradicional de estos dulces, sino que también podremos probarlos y visitar la ciudad del chocolate: Venecia, París, Londres, Madrid... han sido fabricadas otros años con 2.500 kilos de chocolate (50 metros cuadrados ocupa), y este año le toca a la aldea del Rocío una madrugada de Pentecostés, el día grande. Una experiencia para sentirse como un niño. Volveremos a Sevilla y allí nos espera una sorpresa, pues vamos a recorrer la ciudad Tras los pasos de don Juan Tenorio. Al ritmo de los versos de Zorrilla descubriremos rincones llenos de magia que fueron el escenario de una de las más grandes historias de amor jamás contadas. Miércoles 7 Hoy no nos moveremos de la ciudad, y pasaremos el día descubriendo algunos lugares muy, muy especiales. El primero una de las joyas más conocidas de Sevilla, aunque la mayoría de los turistas solo ven su impresionante fachada y no pasan a su interior, no menos espectacular: el Ayuntamiento renacentista. Nosotros lo veremos por fuera y por dentro, conociendo así algunos de los magníficos espacios del siglo XVI y mucho más. Continuaremos después por la calle Cuna hasta llegar a una de las residencias nobiliarias más importantes de Sevilla, el palacio de la condesa de Lebrija, conocido como "el mejor pavimentado de Europa". ¿Sabéis por qué? Porque los suelos son un espléndido conjunto de mosaicos de Itálica, la ciudad romana, que se trajeron aquí. Aquellos mosaicos habían aparecido en terrenos de su propiedad, así que los consideró como suyos y se los llevó a casa. Eso, unido a las antigüedades que había ido comprando doña María Regla Manjón y Mergelina, condesa de Lebrija, dio como resultado la maravilla que podemos ver hoy. Comeremos (incluido) y pasaremos la tarde entre el barrio de San Lorenzo (donde vive el Gran Poder) y el de la Macarena. Nada mejor que esta sevillana clásica de Manuel Pareja Obregón para ponernos en situación: https://www.youtube.com/watch?v=QI4ZeRwvyxA Comenzaremos por la plaza de San Lorenzo, donde veremos la iglesia en la que estuvo "el señor de Sevilla" hasta la construcción de la vecina basílica. Entraremos un momento a ver una de las imágenes metida hasta el fondo del alma de Sevilla, además de una imponente obra de arte. Continuaremos hacia la Alameda de Hércules, el primer paseo de Europa y modelo para otras alamedas de Sudamérica. Allí están, como gran entrada triunfal, los Hércules (Julio César y Hércules en realidad), sobre dos columnas de un antiguo templo romano: Hércules me construyó, Julio César me cercó de muros y torres altas, y el rey santo me tomó con Garcí Pérez de Vargas. De aquí nos iremos al barrio de la Macarena, donde nos asombraremos con la locura barroca de la iglesia de San Luis de los Franceses, diseñada en el siglo XVIII para la Compañía de Jesús. Todo el conjunto es un lugar impresionante, de una riqueza apabullante. Y para acabar el día, no podemos venir a este barrio de Sevilla sin acercarnos a saludar a la Macarena en su basílica. Al fin y al cabo es otra de las grandes devociones de Sevilla, como quedaba claro antiguamente cuando se anunciaban los programas de la Semana Santa: "Ha salido el programa, con el Gran Poder, la Macarena y el Cachorro". Y, al igual que el Gran Poder, una obra de arte incomparable. Después, un autobús nos recogerá para volver al hotel. Tiempo libre para prepararnos para una noche muy especial, porque es la víspera de la Inmaculada y salen las Tunas concepcionistas. ¿Y eso qué es? Pues que tunas venidas de toda España salen a rondar a la Inmaculada (que está sobre una columna en la plaza del Triunfo, junto a la catedral), y desde allí se reparten por el centro de Sevilla. ¿Os imagináis el ambiente? [embed]https://www.youtube.com/watch?v=GL-8L9vVfA4[/embed] Jueves 8 A las 9 de la mañana las campanas de la Giralda repican tocando a gloria como si se hubiera parado el mundo. ¡¡¡Sevilla es así!!! Hoy es un día muy, muy especial, porque Sevilla se implicó más que ninguna otra ciudad en la defensa del dogma de la Inmaculada Concepción, y celebra este día a lo grande. Pasaremos la mañana visitando algunos lugares estupendos, empezando por el impresionante Hospital de la Caridad, creado en el siglo XVII por una hermandad mucho más antigua que había nacido para recoger cadáveres abandonados: la Santa Caridad. A mediados del XVII entró a formar parte de ella un personaje excepcional, Miguel Mañara, y fue él el responsable no solo de que se dedicaran a las siete obras de misericordia (y no solo a enterrar a los muertos), sino también de la construcción del edificio que podemos ver hoy. Para la decoración contó con los mejores artistas que había en la ciudad. Murillo dejó aquí un impresionante conjunto de obras, pero probablemente las más famosas son las que hizo Valdés Leal: In ictu oculi (o sea, en un abrir y cerrar de ojos, que es como viene la muerte) Finis gloriae mundi (así acaban las glorias del mundo). Desde allí nos acercaremos al vecino Hospital de los Venerables, construido para sacerdotes ancianos en aquella misma época. Visitaremos el conjunto, con su magnífica iglesia (donde estuvo la famosísima Inmaculada del mariscal Soult de Murillo, y donde sigue estando el marco, con las letanías de la Virgen talladas) y el espacio dedicado a la Sevilla barroca, con obras de Velázquez y Murillo entre otros. Acabaremos la mañana visitando la pequeña pero bellísima iglesia de Santa María la Blanca, una antigua sinagoga que se convirtió siglos después en una joya del barroco sevillano. Para este lugar hizo Murillo algunas de sus mejores obras. Lamentablemente los franceses se llevaron la mayor parte, pero con motivo del Año Murillo se inauguraron las reproducciones de las que ya no están, con lo que podremos apreciar el deslumbrante efecto del conjunto. Tendremos tiempo libre para comer y por la tarde no podemos perdernos algo de una delicadeza extraordinaria: el antiquísimo baile de los seises, los niños que tienen el privilegio de bailar cubiertos ante el Santísimo, en el altar mayor de la catedral. https://www.youtube.com/watch?v=wnxmWSf-OPs Y para acabar tenemos otra sorpresa. Hoy es el día en que muchas vírgenes sevillanas se ponen en “besamanos” (que con la pandemia se convirtieron en "veneraciones" para evitar el contacto físico), es decir, que bajan de los altares para acercarse a sus fieles en medio de unos montajes absolutamente espectaculares que nos iremos a descubrir. Ninguno tanto, eso sí, como el que prepara la Hermandad del Silencio, en cuya procesión de la Madrugá del Jueves Santo sale un hermano con una espada, recordando el voto que hicieron hace cuatro siglos de defender la Inmaculada Concepción de María hasta la sangre, si fuera preciso. Después, tiempo libre para cenar. Viernes 9 Hoy nos vamos la zona de las marismas del Guadalquivir, y empezaremos en Coria del Río, donde nos encontraremos con que el apellido más frecuente allí es Japón (más de 600 personas). Y con una bandera japonesa colgando del Ayuntamiento, que el heredero al trono imperial, Naro Hito, visitó en 2013. Y con un sake marca "Coria", además de un monumento dedicado a Hasekura Tsunenaga. ¿Qué pasa aquí? Pues resulta que la primera embajada japonesa a occidente tenía como objetivo establecer contacto con el rey de España y con el papa, y estuvieron un tiempo instalados en esta zona (tanto que dejaron abundantes descendientes, también en Espartinas, en Sevilla...). En fin, como dicen allí, los japoneses "flipan en colores". Cruzaremos el río en la barca de Coria, por donde también pasan las carretas que se dirigen al Rocío, y nos iremos a visitar un entorno natural de una enorme belleza, la cañada de los pájaros, en La Puebla del Río. Es una finca rodeada de arrozales que fue una antigua gravera abandonada hasta 1986, con charcas de agua y abundante vegetación . Ha sido restaurada por un joven matrimonio de biólogos españoles, convirtiéndola en un humedal importante y con una gran biodiversidad, en el que se concentra un gran número de especies avícolas en peligro de extinción. Se ha convertido en lugar de invernada para muchas de las aves que van a Doñana y en lugar de nidificación para otras muchas especies. Comeremos (incluido) y ya que hemos empezado a hablar del camino del Rocío en la barca continuaremos, yéndonos a Villamanrique de la condesa, donde nació una de las romerías más importantes del mundo. Parece que ya en plena Edad Media fueron los monteros manriqueños que acompañaban al rey los que encontraron la imagen de la Virgen, en las marismas, y allí nació la primera hermandad que hizo el camino del Rocío, que hoy es madrina de muchas otras que los días anteriores al Lunes de Pentecostés son recibidas aquí de manera multitudinaría, después de pasar el vado del río Quema y antes de llegar a la temible Raya. Hablaremos de ese momento extraordinario del Paso de Hermandades... ...y después continuaremos con nuestro camino, dejando por un rato la provincia de Sevilla para pasar a la de Huelva, donde se encuentra la aldea del Rocío, cerca de Almonte, un lugar único, en el mismo parque nacional de Doñana: marismas, flamencos, arena... un sitio que no se parece a ningún otro. Al acabar, vuelta a Sevilla y tiempo libre. Sábado 10 Pasaremos esta mañana en el Aljarafe, en los alrededores de Sevilla, y comenzaremos el día visitando algo verdaderamente impresionante, los dólmenes de Valencina de la Concepción. Hubo un tiempo en el que la desembocadura del río Guadalquivir no estaba donde está hoy, sino muchos kilómetros más arriba, y en el que un gran brazo de mar ocupaba todo el espacio donde hoy se asienta Sevilla, y mucho más allá. Asomados a ese mar, entre bosques y ríos, hubo diferentes asentamientos humanos, y uno de los más importantes y mejor conocidos es este de Valencina de la Concepción. Con unas 400 hectáreas de extensión (cuando la mayoría de los poblados no pasaban de dos) destacan especialmente estos impresionantes monumentos funerarios megalíticos (o sea, hechos con mega litos, piedras grandes), construidos hace unos 4.000 años. De ellos visitaremos el dolmen de la Pastora, con una larguísimo pasillo de casi 50 metros (el más largo conservado en España) que nos lleva hasta una cámara funeraria circular, el "tholos". De allí nos iremos a Olivares, que a todos nos sonará gracias a un personaje de primer orden dentro de la España del Barroco: don Gaspar de Guzmán y Pimentel, conde-duque de Olivares. Ya el emperador Carlos había nombrado a los Guzmán condes de Olivares, y fue en esa época cuando el primer conde construyó su palacio renacentista en el pueblo. Su sucesor, embajador de España en Roma, fue el padre del famoso III conde, el valido de Felipe IV, quien enterró a sus padres en la capilla y recibió del papa una bula que elevaba el rango a colegiata. Él y su mujer dejaron numerosísimas obras de los mejores artistas en ella, así como la famosa colección de reliquias, la segunda más importante de España después de la de El Escorial. Hoy todo este conjunto se conserva magníficamente y podremos visitarlo. El palacio es sede del Ayuntamiento y en él hay una estupenda colección de reproducciones de trajes barrocos, y en la colegiata, entre otras cosas, podremos visitar la impresionante capilla de las reliquias, con cerca de cien relicarios. Comeremos (incluido) y nos iremos a pasar la tarde a Écija, una ciudad barroca que, entre otras muchas cosas, tiene un impresionante conjunto de bellísimas torres. Haremos un recorrido que comenzará en "el salón", la plaza principal, donde encontraremos, por ejemplo, el palacio de Benamejí, sede del museo, en el que se conservan piezas arqueológicas tan importantes como la amazona herida aparecida hace no muchos años, probablemente hecha en algún taller de la antigua Atenas. En la misma plaza está la impresionante fachada barroca del palacio de Peñaflor, también con miradores para que las familias nobles de la localidad pudieran contemplar los festejos desde allí. Descubriremos alguna de sus iglesias y sus torres y después volveremos a Sevilla, donde nos espera una sorpresa: vamos a visitar los Reales Alcázares de noche, abiertos para nosotros, y vamos a hacer algo muy especial, un recorrido con música en directo y versos que nos llevarán hacia atrás en el tiempo por uno de los lugares más hermosos que existen, desde Lorca a las cantigas de Alfonso X el Sabio. Día 11 Vamos a pasar la última mañana en Itálica, la primera ciudad romana fundada no solo en Hispania, sino fuera de Italia. Al finalizar la segunda guerra púnica, que fue el motivo por el que los romanos vinieron a la Península Ibérica, instalaron a los soldados heridos en una ciudad indígena que ya existía. Como la mayoría eran italianos, probablemente esa fue la razón de que fuera llamada Itálica. Tiempo después, a finales del siglo I y comienzos del II d.C., la ciudad alcanzó su máximo esplendor, siendo la cuna de dos de los más importantes emperadores de la historia de Roma, Trajano y Adriano, que fueron particularmente generosos con su ciudad natal. Adriano especialmente, pues la embelleció con excelentes edificios públicos. El conjunto contaba con enormes mansiones pavimentadas con mosaicos, el cuarto anfiteatro más grande del Imperio... De allí nos iremos al vecino monasterio de san isidoro del Campo, fundado en 1301 por los fundadores de la casa de Medina Sidonia, Guzmán el Bueno y su esposa. Allí se instalaría el monasterio cisterciense más meridional de Europa, aunque con el tiempo los sustituirían los monjes jerónimos. Los claustros mudéjares, la iglesia gótica, el retablo de Martínez Montañés (el dios de la madera, como lo conocieron sus contemporáneos), las tumbas de los fundadores... forman un conjunto absolutamente espectacular. Después nos iremos a la estación, donde tendremos algo de tiempo libre para comer. Saldremos a las 14'48 para llegar a las 18'29 a Zaragoza. Precio – 1.550 por persona (suplemento habitación individual, 350 €) - AVE Zaragoza-Sevilla y Sevilla-Zaragoza
- Autobús para los desplazamientos fuera de Sevilla
- 7 noches en el hotel Zenit 4 estrellas, en régimen de alojamiento y desayuno
- Todas las visitas guiadas, y guías acompañantes
- Entradas
- Alcázar de Carmona
- Iglesia de San Juan Evangelista en Marchena
- Iglesia de san Miguel en Morón de la Frontera
- Fábrica de la Estepeña y convento de Santa Clara, en Estepa
- Visita a la cañada de los pájaros
- Barca de Coria
- Centro de la interpretación de la romería del Rocío en Villamanrique de la Condesa
- Dólmenes de Valencina de la Concepción
- Colegiaa de Olivares
- Palacio de Benajemí en Écija
- Itálica
- Monasterio de San Isidoro del Campo, en Santiponce
- Sevilla
- Real Maestranza de Caballería
- Ayuntamiento
- Palacio de la condesa de Lebrija
- San Luis de los Franceses
- Hospital de la Caridad
- Hospital de los Venerables
- Santa María la Blanca
- Visita nocturna a los Reales Alcázares
- 6 comidas
- Seguro de asistencia + cancelación (COVID)
Forma de reserva - Llamando al 976207363 o escribiendo a contacto@gozarte.net para hacer una reserva
- Pago de 350 €, por persona, en el momento de la reserva, y el resto antes del 4 de noviembre, bien con tarjeta en nuestra oficina (llamando antes al teléfono 976207363) o por transferencia en la cuenta ES47 2085 0130 7803 3063 6082 (beneficiario Gozartours), INDICANDO SU NOMBRE Y “SEVILLA” EN EL CONCEPTO.
El precio NO incluye: - Ningún servicio que no esté especificado
La agencia de viajes es: VIAJES VIMAR S.A. AUTOVIA DE LOGROÑO, KM. 2,400 POLIGONO EL PORTAZGO 66 50011 – ZARAGOZA Título: C.A.A.: 3MM GOZARTOURS C/ San Agustín, 27-29, 2º B 50002, Zaragoza Título: C.A.A. 325 #Gozarte #SevillayProvincia #gastroturismozgz12 #GASTRONOMÍAENZARAGOZA |
No hay comentarios:
Publicar un comentario