Cocineros que pasan buena parte de la jornada picando los ingredientes de los platos más revolucionarios, Charcuteros o Carniceros que quieren sacar el mejor bistec sin apenas esfuerzo o Cortadores de Jamón que buscan la loncha perfecta. Todos estos profesionales tienen un denominador común: los cuchillos.
Sin embargo, a pesar de ser herramientas claves en su trabajo, con las que pasan buena parte de la jornada laboral, a veces se convierten en “los grandes olvidados”. Y es que, tras meses de intenso trabajo el filo comienza a flaquear, cada vez cuesta cortar más o hacerlo más fino y, muchas veces, los enfados por ello, acaban terminando en la compra de cuchillos nuevos con un gasto económico notable. Pasados pocos meses la historia se repite. Nos encontramos con unas herramientas que no están siempre a la altura y con números rojos en la cuenta de “menaje”.
Pero esto ya se acabó.
Es decisivo que un profesional sepa hacer que sus herramientas no le fallen jamás, que las sepa mantener, que sepa sacarles siempre el máximo rendimiento. Y, para ello, tiene que aprender a conocerlas desde cerca.
Lo primero, saber qué cuchillo comprar cuando nos encontramos frente a una estantería. Y es que los estudios dicen que es el packaging o envoltorio uno de los motivos fundamentales por los que se vende cuchillería en España. Eso significa una cosa: Que no tenemos ni idea de cómo valorar lo que hay dentro. Y eso, para alguien que trabaja con cuchillos es esencial.
Por eso nace el Curso de la EICJ “Cuchillería y Afilado”, para que no vuelvas a comprar un cuchillo por su envoltorio y que puedas mantenerlo durante años como si fuera recién salido de fábrica. Eso no es magia, es técnica. Y podemos enseñártela al milímetro.
Saber cómo influye la dureza del acero (y cómo se mide), si el cuchillo ha de ser o no flexible, qué tipo de empuñadura nos conviene más o en qué se diferencia un “forjado” de un “inyectado” son elementos clave para alguien que trabaja día a día con cuchillos. Pero hay algo más: Práctica. Una práctica trasmitida por los mejores maestros cuchilleros que llega a la EICJ para que nunca vuelvas a decir “este cuchillo no corta”.
En directo, y con tus propias manos transformarás un cuchillo sin filo en uno como nuevo. Y lo mejor de todo: Aprenderás a hacerlo para que siempre estén impecables.
Por eso, si trabajas con cuchillos, esta es una oportunidad de oro para facilitar tu trabajo, evitar lesiones y ahorrar mucho dinero. Así que, ¿Dispuesto a convertirte en tu afilador de confianza?
Enlace en Facebook:
No hay comentarios:
Publicar un comentario