jueves, 2 de enero de 2014

Turismo comienza a rastrear en internet casas rurales y apartamentos ilegales

La DGA analizará en los portales digitales la oferta irregular para poder actuar cuando se apruebe la ley.




«Alquilo apartamento por 60 euros al día», «alojamiento en temporada alta en el Pirineo aragonés». Podrían ser dos anuncios tipo departiculares ofreciendo su vivienda de forma ilegal en internet para uso turístico. La Dirección General de Turismo ha enviado una carta a los servicios provinciales para que comiencen a rastrear los apartamentos turísticos y las casas rurales ilegales que se ofertan en portales turísticos de internet. De esta forma, quiere allanar el camino para intervenir contra estos alojamientos en cuanto disponga de los instrumentos legales adecuados. 

En concreto, la directora general de Turismo, Elena Allué, insta adeslindar y cuantificar la oferta legal de la ilegal, a comunicar a las comarcas la ilegal que sea de su competencia y a establecer un plan de inspección. A los servicios provinciales se les ha adjuntado un extensivo listado de portales turísticos, algunos con más de 700 establecimientos, para localizarlos. Se trata de buscar todos aquellos apartamentos que ofrecen particulares para uso turístico y que ahora escapan al control de Turismo, porque se encuentran incluidos en la Ley de Arrendamientos Urbanos y por tanto, son competencia de Hacienda. 

Precisamente, el Senado está debatiendo la reforma de esta normativa, que regula los alquileres distintos al de vivienda. El objetivo es excluir este tipo de alojamientos turísticos. «Ahora no podemos ir contra ellos, porque no son turísticos. Podría actuar Hacienda porque es economía sumergida», informó Allué, que anunció que se pretende regularizar desde la Comunidad estos alojamientos. Posiblemente se hará mediante una modificación de la Ley de Turismo a finales de este año, para posteriormente desarrollar un decreto más específico sobre estos alojamientos. 

Pero ¿cómo detectarlos? Según explicó la directora general, se localizan porque suelen ofrecer la vivienda de forma puntual, para días sueltos, fines de semana o temporadas altas. La mayoría se concentran en el Pirineo aragonés y en Teruel. A partir de su rastreo y detección, inspección podría imponer una sanción (cuando se apruebe la norma). El futuro reglamento fijará las infracciones y las sanciones económicas, que se prevé serán altas con el fin de disuadir de este tipo de prácticas. 

Elena Allué argumentó que se quiere poner «coto» a la proliferación de apartamentos ilegales con dos objetivos: aflorar la economía sumergida y por tanto, «evitar el intrusismo y la competencia desleal en un sector ya muy dañado por la crisis» y asegurar que las personas que se alojan tengan garantías de seguridad, salubridad y servicios mínimos. Además, destacó que estos turistas «escapan ahora al control estadístico de viajeros y ocupación», por lo que desvirtúa el peso real del turismo en la economía aragonesa. 

No obstante, este tipo de alojamientos podrán regularizarse. Allué explicó que hay muchos ciudadanos que, en estos momentos de crisis, alquilan sus segundas residencias para poder afrontar la hipoteca. No descartó que estas puedan seguir siendo arrendados, pero siempre que estos ingresos se declaren. También podrán legalizarlos si se adoptan al Reglamento de los Apartamentos Turísticos en Aragón, que se encuentra en los servicios jurídicos de la DGA y solo deberá superar ya el informe del Consejo Consultivo. Una vez aprobado, se realizará una campaña de inspección para clasificar en categorías (llaves) conforme a la normativa, lo que ayudará a combatir la competencia desleal. 

Esta norma, en concreto, define los apartamentos turísticos como aquellos bloques, conjuntos o viviendas que ofrezcan, mediante precio, «alojamiento turístico, cuando se ceda el uso y disfrute de los locales referidos con mobiliario, instalaciones, servicios y equipo en condiciones que permitan su inmediata utilización». Estos tendrán que cumplir los requisitos técnicos y obligaciones impuestas para los edificios de uso residencial (instalaciones eléctricas, sanitaria, prevención de incendios...). 

Cinco años para adaptarse

Además, el texto fija la capacidad que deberán tener en función del número de dormitorios dobles o individuales. Tendrán que contar con dormitorio, cuarto de baño, salón-comedor y cocina e identificarse con las siglas 'AT'. Se establece los servicios mínimos que deben prestar (periodicidad mínima de limpieza, mantenimiento de las instalaciones, recogida de residuos...) y los específicos en función de la categoría (hay cuatro). También se prevé la posibilidad de presentar una declaración responsable previa a la apertura. Y se da cinco años para adaptarse a la nueva normativa. 

En Aragón hay 317 apartamentos turísticos que ofertan 5.473 plazas (3.640 en Huesca, 1.138, en Teruel y 686 en Zaragoza).

Enlace Heraldo de Aragón:
http://www.heraldo.es/noticias/aragon/2013/05/12/turismo_comienza_rastrear_internet_casas_rurales_apartamentos_ilegales_233997_300.html

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